La buena noticia es que las amenazas de bomba contra diversas instalaciones gubernamentales han quedado solamente en eso. Amago y susto, sin hechos concretos que lamentar (hasta ahora).
La mala noticia es el propósito infame que asoma tras los reiterados episodios de este tipo. Maquinación, insidia, planes orquestados para generar terror entre centenares de burócratas, sus familias y la sociedad entera.
Obra de quienes desde su profunda frustración político-electoral, apuestan a la desestabilización de un nuevo régimen que aterriza con la bandera de combatir la corrupción y castigar el saqueo de la administración anterior.
En la mañana de este miércoles 16 tocó el turno al edificio de la Auditoría Superior del Estado (ASE) ubicada en las calles Siete, Berriozábal y Anaya.
De nueva cuenta la amenaza de bomba, la interrupción del tareas cotidianas, el desalojo ordenado de trabajadores y funcionarios públicos, la movilización policial y el puntual operativo de Protección Civil.
Acaso sea importante recordar que la ASE tiene hoy a su cargo revisar las cuentas del gobierno anterior, secretarías, subsecretarías, direcciones, organismos descentralizados y hasta las gerencias de las Comapas.
Mire usted, los emisarios del pasado inmediato andan muy nerviosos, están muy molestos desde que perdieron el control político de Tamaulipas y no han acabado de digerir la derrota en las urnas.
Los más afortunados (por encumbrados) cruzaron desde hace meses la línea fronteriza y hoy hacen vida en el Valle de Texas, embebidos de esa prosperidad artificial que les dejó el cargo.
Los mandos medios y de más abajo no tuvieron tanta suerte, en particular quienes se quedaron en Victoria, a expensas de la justicia.
TAREAS DE LIMPIEZA
Y bueno, un día anterior (martes 15) en un certero operativo de la Policía Ministerial Federal y elementos de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) se consumó el arresto de un número aún no determinado de policías pertenecientes al Grupo de Operaciones Especiales (GOPE), las polémicas fuerzas de élite al servicio del exgobernador CABEZA DE VACA.
Se han documentado diversos abusos de estos uniformados, incluyendo la masacre de Camargo, ocurrida en enero del 2021, cuando fueron victimados y calcinados 19 migrantes centroamericanos.
Tras dicho episodio fueron consignados 12 agentes, hoy todavía a disposición de un juez que tiene a su cargo el correspondiente proceso legal.
Necesario es decir que los GOPES fueron ubicados inicialmente dentro del organigrama gubernamental, en línea staff con el Jefe del Ejecutivo, sin pasar por la Secretaría de Seguridad Pública.
Eran los sicarios de CABEZA, que recibían órdenes directas, transmitidas a su creador y titular FELIX ARTURO RODRÍGUEZ. De nadie más recibían instrucciones.
Lo comenté en esta columna cuando ocurrió la matanza en Santa Anita de Camargo. El gobierno albiazul dotó a sus “rambos” de poderosos y caros vehículos artillados modelo SANDCAT.
Tanquetas ligeras, blindadas, para uso urbano, dotadas con circuito cerrado, cámara de visión térmica y nocturna, cofre blindado, defensa frontal reforzada, escalón para tirador, intercomunicador y monitoreo para C-4.
Lustrosos carromatos en color azul intenso y vivos blancos, con su escudo dorado, una estrella azul marino de cinco picos sobre un círculo amarillo y las leyendas “Tamaulipas, S.S.P., Operaciones Especiales”. (Interiores, columna “Camargo, Men In Black”, febrero 4 de 2021, https://tinyurl.com/yeskklqb).
A RENDIR CUENTAS
Aunque no es el único caso que tiene con los pelos de punta a los personeros del régimen panista. También esta semana, la contralora estatal NORMA ANGÉLICA PEDRAZA confirmó que el próximo 29 de noviembre vence el plazo de 60 días otorgado a un amplio número de exfuncionarios estatales llamados a comparecer por presuntas irregularidades.
La nota es importante porque una vez agotado dicho periodo, aquellos que hayan incumplido con este ordenamiento legal serán turnados a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, para ser requeridos por la vía penal.
En dicha tesitura se encuentran los citatorios girados a exservidores públicos ubicados en dependencias como las secretarías de Bienestar Social, Administración, Educación y Salud, entre otras.
Comentó la contralora que en varios casos las personas requeridas por oficio no han podido ser localizadas en el domicilio que dejaron registrado cuando llegaron. Se hicieron ojo de hormiga.
Al respecto cabe señalar que la mayor parte de los personajes requeridos incumplió con la obligación de atender el procedimiento de entrega-recepción. No informaron de haberes ni de teneres, menos del estado que guardan las oficinas que tuvieron a su cargo.
La amargura de la derrota los llevó al más irresponsable de los abandonos. Se fueron sin rendir cuentas a sus sucesores en cada cargo y dependencia, dejando pendientes que se han comentado varias veces en este espacio, el saqueo de equipos de oficina y el grave daño al parque vehicular.
MÚSCULO MILITAR
Y, bueno, ante los repetidos amagos de violencia contra las instituciones legítimas del Estado, habrá que subrayar la importancia del apoyo que ha venido incrementando la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) al gobierno que preside el doctor VILLARREAL ANAYA.
Espaldarazo que ahora confirmamos con el arribo a esta capital de personal enviado por la Cuadragésima Octava Zona Militar y la Guardia Nacional, en el marco del denominado Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024.
Desplegarán sus operativos en diferentes colonias de Ciudad Victoria buscando reducir la incidencia delictiva, particularmente en el ramo de robos y homicidios vinculados a la delincuencia organizada.
BUZÓN: lopezarriagamx@gmail.com
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