Dr. Jorge A. Lera Mejía
Sin duda, uno de los temas que en tiempos recientes han dado mucha información y reflexiones para Tamaulipas y el gobierno de Américo Villarreal Anaya, ha sido la sequía persistente por el cambio climático, así como la necesidad de buscar alternativas de solución para la disponibilidad de agua potable para el consumo humano, así como agua corriente para las actividades productivas de Tamaulipas.
En ello está AVA desde que arranca su gobierno en octubre del pasado año, que insiste en buscar soluciones tanto de corto como de largo plazo, entendiendo el compromiso que tiene, al venir de un ex gobernador que hizo carrera e historia, precisamente en temas hidráulicos, al haber incidido Américo Villarreal Guerra a nivel nacional y estatal en soluciones de esos conflictos, que ahora son de mayor gravedad.
Hoy, sin descuidar la urgente necesidad de disponer de agua para consumo humano, en las principales ciudades de Tamaulipas, el tema de agua para uso agrícola y pecuario pasa a ser fundamental.
Sabemos del deseo de AVA para traer agua desde el Río Pánuco hacia las presas Vicente Guerrero y la Marte R. Gómez, pero también sabemos del reto presupuestal y técnico que ello amerita, al grado que hoy día se sigue pensando que será difícil encontrar recursos superiores a los 40 mil millones de pesos que dicha hazaña costaría para hacerla realidad, no obstante que esa meta ayudaría incluso a resolver parte de la escasez del mismo recurso hídrico del estado de Nuevo León.
Además de lo citado, el gobierno de Tamaulipas entiende y estudia las necesidades de agua para riego de auxilio del campo tamaulipeco, que requiere respaldar para volver a hacer del estado, el Granero de México que en los 70 y 80’s representó.
Esta semana, los agricultores del norte del estado, no obstante, de la crisis del agua sumada la crisis de ausencia de precios de garantías para los granos como el sorgo y maíz tamaulipecos, se arriesgan a decir que con todo y ello, seguirán apostando a seguir sembrando sus granos, comprometiendo con ello, para que AVA y su equipo de trabajo sigan buscando alternativas de solución a ambos problemas tanto del agua de riego como de asegurar precios atractivos para las cosechas agropecuarias.
Ante ello, los productores señalan que no se frenará el programa de siembras del próximo ciclo agrícola por la falta de apoyos y recursos federales, a pesar que las políticas de producción del campo se encuentran
mal implementadas en el orden federal.
Sobre el tema, integrantes de la Unión Agrícola Regional del Norte de Tamaulipas opinan que en realidad necesita el sector la inyección de recursos para solventar gastos de inversión, sin embargo, no por ello se habrán de parar las actividades en el campo agrícola.
Siempre la intención es sembrar todo, señalan, que serían aproximadamente
750 mil hectáreas para esta zona norte, sin embargo, será evidente que algunos agricultores no alcanzarán para realizar estas labores para el próximo periodo agrícola.
Sin embargo, habrán de esperar los tiempos marcados en el programa de siembra implementado por las autoridades de agricultura.
Por lo pronto hacen falta más lluvias, pues, con la reciente tercera ola de calor, la humedad en las superficies ha desaparecido; sin embargo, de acuerdo a los pronósticos se tiene confianza de que estas se habrán de presentar…