Una ola de infecciones por coronavirus a finales del verano ha afectado a las escuelas, los lugares de trabajo y al gobierno local, mientras los expertos advierten al público que se prepare para una propagación aún mayor del Covid-19 este otoño e invierno.
Las hospitalizaciones aumentaron un 24 por ciento en un período de dos semanas que finalizó el 1 de agosto, según los datos más recientes del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades. El monitoreo de las aguas residuales sugiere un aumento reciente de las infecciones por Covid en el oeste y el noreste. En comunidades de todo Estados Unidos, se han producido brotes en las últimas semanas en escuelas preescolares, campamentos de verano y edificios de oficinas.
Los funcionarios de salud pública dijeron que el último aumento en las hospitalizaciones por Covid es todavía relativamente pequeño y que la gran mayoría de los enfermos experimentan síntomas leves comparables a los de un resfriado o gripe. Y la mayoría de los estadounidenses, más de tres meses después de que la administración de Biden permitiera que expirara la declaración de 2020 que calificaba al coronavirus como una emergencia de salud pública, han mostrado poca voluntad de regresar a los días de pruebas frecuentes, uso de mascarillas y aislamiento.
Pero para los estadounidenses que se han acostumbrado a sentir que la nación ha superado el Covid, la ola actual podría ser un duro recordatorio de que la nueva normalidad emergente no es un mundo sin el virus. (Agencias)