La Corte del Distrito de Columbia ordenó ayer lunes un cambio en las medidas cautelares de la liberación supervisada de Emma Coronel Aispuro, por lo que la esposa de Joaquín “El Chapo” Guzmán deberá permitir a cualquier autoridad revisar sus propiedades, aparatos de comunicación, cuentas de redes sociales y de correo electrónico, sin necesidad de notificación previa o la entrega de una orden.
La medida estipula además que Coronel dé su consentimiento para que las autoridades estadounidenses supervisen todos sus movimientos financieros.
“El imputado permitirá una revisión, en cualquier momento, con o sin orden de cateo, y por cualquier autoridad, de su persona, así como de su propiedad”, se lee en la orden que hizo pública la Corte.
Las autoridades especificaron que el domicilio, vehículo, documentos, computadoras, celulares, así como “otros aparatos electrónicos de comunicación o de almacenamiento de datos” serán sujetos de la nueva medida.
La misma se aplicará en caso de que las autoridades sospechen que Coronel podría estar violando su libertad condicional o que presente una conducta delictiva.
Adicionalmente, Coronel Aispuro deberá dar al oficial probatorio una autorización para que el banco entregue su historial crediticio a las autoridades. También tendrá que presentar evidencia de la gestión de sus impuestos, así como un estado financiero que documente sus “activos, ingresos, gastos y pasivos”.
Emma Coronel abandonó hace menos de tres meses el centro de transición para reos en Long Beach, California, tras cumplir con una sentencia de tres años por ayudar al Cártel de Sinaloa, que fundó su esposo.
Llegó allí en junio pasado desde la prisión federal de mínima seguridad FMC Carswell en Forth Worth, Texas, donde Coronel Aispuro estaba cumpliendo su condena.
Con su salida, Coronel entró en libertad condicional. Medida que durará vigente 48 meses; durante ese periodo, Aispuro deberá permanecer dentro del distrito judicial asignado y comunicar a agentes gubernamentales cualquier cambio de domicilio o empleo.
