Por Carlos López Arriaga
Cd. Victoria, Tam.- Exsecretaria del Trabajo y titular de SEGOB, levanta la mano LUISA MARÍA ALCALDE para la Presidencia de MORENA, silla que estará vacante en breve cuando su titular, MARIO DELGADO, asuma la secretaría de Educación.
Por lo pronto ya dijo SHEINBAUM que “tiene la mejor de las opiniones” sobre LUISA pues “ha sido secretaria de Estado, pero al mismo tiempo trabajó tocando casa por casa, estuvo encargada de Jóvenes de Morena”, no sin antes aclarar que la decisión es del partido. (https://is.gd/FvfwDY).
Aunque, mire usted, ¿con ese respaldo de la doctora quien podría oponerse?… El dato es que la gestión de MARIO termina el 31 de octubre. Para entonces ya habrá ocupado la oficina principal de la SEP, lo que hace pensar en alguna dirigencia interina. Por escalafón, le toca a CITLALLI.
Cinco presidencias ha tenido, hasta ahora, MORENA. La fundacional, a cargo de MARTÍ BATRES (2012-2015), quien dejaría su lugar al propio AMLO para el periodo 2015-2018, renunciando este en 2017 para ser candidato presidencial y dejar el cargo en manos de YEIDCKOL POLEVNSKY, por prelación, pues era secretaria general.
LA TRIFULCA
En aquel triunfal 2018, mientras los operadores principales del obradorismo se preparaban para asumir el mando, YEIDCKOL logra ampliar su encomienda un año más, hasta 2019, alegando que tenía tareas pendientes, ya como partido en el gobierno.
Pero llega noviembre del 2019 y de nueva cuenta la señora POLEVNSKY insiste en quedarse, desatendiendo (boicoteando) exigencias de convocar a elecciones. Quería quedarse otro año, sin mediar elección, así nomás por pura inercia.
En dicho empeño permanecerá YEIDCKOL durante los meses posteriores al año de gracia. Noviembre y diciembre de 2019, así como enero de 2020, en cuyo día 26 finalmente renuncia. En esta columna comenté entonces que no se fue, la extirparon.
Dejaría la silla a un segundo interino, el exlíder barzonista ALFONSO RAMÍREZ CUELLAR, quien administrará una nueva transición de enero a noviembre del citado 2020, llamando a elecciones para el periodo 2020-2024.
PRESENTE Y FUTURO
El ganador de la contienda interna fue MARIO DELGADO, tras superar, entre otros, a la contadora BERTHA LUJÁN, de reconocida trayectoria como sindicalista universitaria en su natal Chihuahua y también secretaria fundadora de MORENA, en mancuerna con BATRES (2015-2018).
La vida da muchas vueltas y hoy vemos a LUISA MARÍA ALCALDE (hija de BERTHA) encaminarse al cargo que cuatro años atrás buscó su señora madre. Pero esta vez con el aval manifiesto de una mandataria electa.
Cuenta además con las simpatías de la senadora CITLALLI HERNÁNDEZ, número dos en MORENA, quien tiempo atrás había anunciado su intención de participar en la puja por la dirigencia, pero se bajó de la contienda en apoyo a LUISA MARÍA.
Al respecto dijo: “Ella tiene 36 años y yo tengo 34. Las dos nacimos en MORENA, no venimos de ningún antecedente partidista.”
Añadiendo estar “muy tranquila de que LUISA pueda ser la próxima presidenta del partido”, pues “tendrá claro lo que se necesita para la siguiente etapa. Le compartiré lo que pienso que hay que cambiar; conozco las entrañas del partido estos cuatro años que estuve.” (Entrevista completa, texto y video, en portal SIN EMBARGO: https://is.gd/7kMSFo).
NUEVA ETAPA
La pregunta, entre otras, es qué suerte de dirigente sería LUISA, tras la gestión exitosa de MARIO. Es abogada por la UNAM con maestría en derecho en la Universidad de Berkeley, California.
Es operadora a ras de tierra y se diría que obradorista de segunda generación. No pertenece al staff científico que rodea a la doctora SHEINBAUM, sino al político.
Esto es, con militancia juvenil en las izquierdas desde los días de AMLO en la jefatura del gobierno capitalino (2000-2005), donde BERTHA fue contralora general. Su padre es el abogado laborista ARTURO ALCALDE, por igual militante de izquierda.
Y bien, entre aquel obradorismo de cuatro gobernadores en 2018 y el actual de 23 mandatarios que deja por saldo la elección del 2024, ¿es MORENA ya un partido moderno con madurez suficiente para tomar decisiones propias y operar con saludable autonomía del poder?, ¿o sigue siendo un movimiento generado a partir de un liderazgo carismático?
Habrá que ver con qué proyecto, propósitos generales y metas específicas, llega su nuevo Comité Ejecutivo Nacional. Y quién iría a la secretaría general haciendo mancuerna con LUISA.
EN TODAS PARTES
Y siguen avanzando las mujeres en cargos de primer nivel. Ya tuvimos dos candidatas presidenciales; en octubre habrá mandataria y es probable que en su toma de posesión, los tres poderes estén representados por damas.
CLAUDIA en el Ejecutivo, NORMA PIÑA desde el Judicial y la muy probable inclusión de la doctora IFIGENIA MARTÍNEZ presidiendo la mesa legislativa del mes.
En 1987, doña IFIGENIA fue precursora de la Corriente Democrática en el PRI, junto a CUAUHTÉMOC CÁRDENAS y PORFIRIO MUÑOZ LEDO, disidencia que se convertiría en ruptura en 1988, con la formación del Frente Democrático Nacional (FDN), de donde nacería el PRD.
El pasado 2 de junio, la doctora SHEINBAUM comentó al salir de la casilla electoral que había votado por IFIGENIA. Igual se han prodigado homenajes a la misma persona, como el dispuesto por MARTI BATRES, en su calidad de jefe de gobierno, al imponer el nombre de “IFIGENIA MARTÍNEZ y HERNÁNDEZ” a un centro escolar, el Instituto de Educación Media Superior (IEMS) Plantel Iztapalapa.
Tiempos interesantes, ni modo.
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