Hugo Reyna / Corresponsal
En su libro “Leyendas de Reynosa”, Don Cesar Humberto Issasi Cantú (qepd), quien fuera cronista de la ciudad recopila una serie de historias que son del dominio popular y que se cuentan como verídicas y acontecidas en nuestra frontera.
Una de ella está relacionada a la leyenda del “Vampiro de Reynosa” que Issasi Cantú en el relato “Como se fabrica una Mentira”, da cuenta de una historia nacida del apremio de noticias de un periódico “El Informador” dirigido y fundado por Don Rodolfo Martínez Lerma “El Duende”.
Según se cuenta en la década de los 60’s, el periódico “El Informador” gozaba de prestigio como medio informativo, eran tiempos en donde la televisión iniciaba y la radio compartía las noticias con el diario.
Ocurrió que Don Rodolfo Martínez, hombre avezado en el periodismo y preocupado por sus lectores, tomó una versión propalada que en la colonia Cumbres que eran en aquel entonces los límites de la parte Poniente de la ciudad, apareció un vampiro, un ser de la oscuridad que se dedicaba atacar a sus víctimas y extraerles la sangre como Drácula.
Durante varias semanas “El Informador” mantuvo cautivo a sus lectores con las historias de presuntos ataques del Vampiro y sus andanzas por las colonias de Reynosa, pero nunca se presentaron las evidencias de las presuntas víctimas, nadie compareció ni relato los testimonios del ser de ultratumba.
Entonces, con el tiempo la noticia sensacionalista decayó, un día antes de ingresar el célebre Bar “Mission”, el periodista Don Rodolfo Martínez Lerma se encontró con un conocido medico reynosense, quien de inmediato le lanzó, “Oye Duende, acabo de ver al Vampiro- ¿Donde? – Le pregunto el periodista- Aquí cerca por la estación de ferrocarril, respondió el galeno. Al día siguiente el periódico de Don Rodolfo publicó: “A conocido medico de Reynosa se le aparece el Vampiro”.
Y de nueva cuenta la leyenda se reavivó y por ende el consumo de periódicos y más historias y presuntos ataques atribuidos al mounstro chupa sangre.
Incómodo y molesto por la popularidad indeseable ganada por la revelación que resultó ser una broma hacia el periodista, el medico reynosense en la oportunidad que tuvo le reprochó a Martínez Lerma la filtración de su comentario y divulgarlo en las páginas de “El Informador”.- No me dijiste que habías visto al Vampiro por el Ferrocarril- le dijo, “Pues sí, pero era una broma-secundó el médico, -Bien, yo también lo tome como una broma- y a propósito dime ¿Cómo es el Vampiro?, pregunto Don Rodolfo Martínez Lerma.
Cabe referir que esta es una leyenda contenida en el libro “Leyendas de Reynosa” de Cesar Humberto Issasi Cantú (qepd).