En la ciudad texana tan sólo deben consumir agua embotellada ante el temor de intoxicarse.
CIUDAD DE MÉXICO. Los 324 mil habitantes del puerto de Corpus Christi, en el Golfo de México, enfrentaban ayer una emergencia que los obligará a usar sólo agua embotellada para todo, desde la regadera y el lavado de trastes hasta el consumo humano, “hasta nuevo aviso”.
De acuerdo con las autoridades locales, la decisión fue tomada luego de verificarse que sustancias químicas posiblemente habían contaminado el suministro de agua de la ciudad, debido a un incidente en su distrito industrial.
La sustancia fue identificada como Indulin 86AA, catalogada como “un emulsionante de asfalto, que puede causar quemaduras en la piel, los ojos o los órganos internos si se ingiere.
Se estima que de tres a 24 galones se filtraron en el suministro de agua.
Hasta el cierre de esta edición no se habían registrado problemas, y aunque no se considera que la sustancia sea venenosa o un “peligro para la salud”, sí puede provocar
reacciones alérgicas
El miércoles por la noche, un comunicado de prensa del gobierno municipal aconsejó a los residentes “evitar el agua del grifo como una precaución y hasta que los resultados puedan confirmar la seguridad del agua”.
Lillian Riojas, portavoz de Valero, una refinería de la ciudad, indicó a su vez a través de un boletín que había una emisión de reflujo “en operaciones de terceros” cerca de la terminal de asfalto de Valero.
En este momento, creemos que se trata de un problema de reflujo localizado de operaciones de terceros en el área de la terminal de asfalto de Valero. No creemos que este problema esté causado por las refinerías Corpus Christi de Valero.
Creemos que esta cuestión está aislada de una línea industrial lateral, Valero está ofreciendo sus recursos para ayudar a la ciudad a aislar el problema y ayudar a confirmar esto no ha afectado el suministro de agua de la ciudad”, se detalló en el comunicado.
A los residentes se les aconsejó que sólo se deben usar agua embotellada para todo tipo de bebidas, y preparación de alimentos (incluyendo leche y jugo), hacer hielo, cepillarse los dientes, lavar los platos o la ropa, lavarse las manos y bañarse hasta nuevo aviso, según el comunicado de funcionarios de la ciudad.
En cuestión de minutos, las tiendas fueron inundadas con los residentes, quienes rápidamente acudieron a buscar agua embotellada. El inventario se había terminado a una hora del anuncio de la ciudad, detacó el diario estadunidense Usa Today.
También la autoridades advirtieron a los ciudadanos que no trataran de hervir el agua o tomar otras medidas habituales para su prurificación.