El gobernador de Tamaulipas, solicitó el apoyo del Instituto Nacional de Migración.
Por Arnoldo García
El gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, solicitó al Instituto Nacional de Migración preste la atención a los cubanos que se encuentran varados en ciudades de la franja fronteriza.
Por ahora a través del Instituto Tamaulipeco del Migrante y las casas del migrante, se ha venido prestando ayuda a los cubanos en Nuevo Laredo, pero ante la cantidad que suman ya se puede tornar un problema, comentó.
Se estima que en Nuevo Laredo hay ya 900 ciudadanos de origen cubano varados, luego de que Barack Obama suspendió el programa “Pies Secos Pies Mojados” mediante el cual se concedían facilidades a éstos para ingresar a los Estados Unidos.
Comentó que el INM debe tomar medida a efecto de ayudar a que puedan regresar a Cuba.
“Después de la política del nuevo presidente de ya no permitir el ingreso a estos ciudadanos cubanos al territorio estadounidense, se quedaron en el limbo, están en nuestra frontera y es ahí en donde le estamos pidiendo al comisionado del Instituto Nacional de Migración que se tomen cartas en el asunto”, dijo.
Agregó que existe preocupación porque los derechos de los cubanos puedan ser vulnerados, así como también por su seguridad e integridad física ante los riesgos frente a la delincuencia.
“No queremos que estos ciudadanos cubanos puedan ser vulnerados en sus derechos y se vea la posibilidad de poderlos llevar a la ciudad de México y llevarlos a su país de origen”.
García Cabeza de Vaca insistió en la urgente necesidad de establecer un fondo de “fronteridad” para hacer frente a las situaciones que se vienen registrando ya en Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros con la presencia de cubanos, haitianos y otros migrantes a quienes no se permite ingresar a Estados Unidos y las deportaciones masivas que se esperan.