Presenta EU solicitud para llevarse a Geño

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La Corte Federal para el Distrito Sur de Texas acusa al exgobernador de Tamaulipas de operar una red de empresas fantasma que lavaron millones de dólares.

Por Arnoldo García

Por los delitos de lavado de dinero, defraudación bancaria, y operar un negocio de transferencias de efectivo sin tener licencia para ello, el gobierno de Estados Unidos solicitó la extradición del exgobernador Eugenio Hernández.

Ayer por la tarde se llevó a cabo una audiencia en el Centro de Justicia Federal en esta ciudad capital, en la que el exgobernador Hernández Flores y su defensa fueron notificados por el juez de distrito Raymundo Serrano Nolasco de la solicitud de extradición.

Hoy viernes vencía el término para que el Gobierno de Estados Unidos presentara la solicitud de extradición, ya que es acusado por una Corte Federal del Sur de Texas de tres delitos.

Junto con Hernández Flores es acusado su cuñado Oscar Guerra Gómez por los mismos delitos y que fue quien implemento las operaciones de lavado de dinero, fraude y la introducción ilegal de dinero a Estados Unidos.

Hasta ahora Oscar Guerra no ha sido detenido.

Tras la notificación la defensa tiene tres días para negar los delitos y 20 días más para probar que son falsas las acusaciones.

Se estima que todo este proceso de extradición podría durar un año, según abogados consultados
Desde el pasado día 6 de octubre, Hernández Flores se encuentra detenido en el Centro Estatal de Ejecución de Sanciones, acusado de los delitos de lavado de dinero, peculado y operaciones con recursos de procedencia ilícita, según el expediente 67/2017 que lleva el Juzgado Segundo Penal.

Dentro del expediente Eugenio Javier es acusado de apoderarse de un predio de mil 600 hectáreas del puerto Industrial de Altamira a través de diversos prestanombres y para lo cual hizo uso de su influencia como gobernador.

Según los informes de la Corte del Sur de Texas, fueron al menos 300 millones de pesos los cuales se introducieron de manera ilegal a los Estados Unidos por Eugenio Hernández y Oscar Gómez, sin que legitimaran su procedencia.