Agencias
Altamira, Tam.- Avanzando con paso firme por el camino correcto para lograr un futuro promisorio, Altamira conmemoró el 269 aniversario de su fundación, festejos que encabezó la alcaldesa Alma Laura Amparán Cruz, acompañada de la presidenta del Sistema DIF, Alma Laura Hernández Amparán, los cuales comprendieron una ceremonia cívica en el busto de Don José de Escandón y Helguera, un recorrido de carretas que inició en la calle Paseo Real para terminar en la explanada del Palacio Municipal de Gobierno donde se efectuó una sesión de cabildo con carácter de solemne y posteriormente, una verbena popular.
En esa junta concejal, se entregó la medalla al mérito ciudadano “José de Escandón y Helguera’’ a la maestra Elba Gallegos Domingo, quien agradeció al Gobierno de Altamira por tal distinción, misma que dedicó a sus padres.
En su intervención, la alcaldesa Alma Laura Amparán agradeció a todas las personas que participaron en estos festejos, señalando que Altamira escribe en el año de 1823 una historia de éxito, al fundar una nueva población que hoy cuenta con puerto y aduana marítima, ciudad hermana y moderna: Tampico, Tamaulipas; en 1924 colaboramos con territorio al poblado de Doña Cecilia y a sus colonias aledañas para que se pudiera erigir un nuevo municipio, la hoy progresista Ciudad Madero; “con ese legado histórico, Altamira representa dignamente una ciudad que es orgullo de Tamaulipas’’.
“El día de hoy, el Gobierno Municipal que me honro en presidir y los habitantes de Altamira, estamos de fiesta y nos congratulamos por celebrar un año más de la fundación de nuestra querida ciudad realizada el 2 de mayo de 1749 por el coronel José de Escandón y Helguera; a 269 años de existencia, los altamirenses hemos logrado avanzar con pasos firmes. Nuestra tierra tiene un pasado brillante, un presente vigoroso y estamos en el camino correcto para alcanzar un gran futuro’’, mencionó.
Las actividades conmemorativas iniciaron con una misa en la iglesia Santiago Apóstol, para luego efectuarse una ceremonia cívica en la plaza de José de Escandón y Helguera donde se depositó una ofrenda floral y se montó una guardia de honor en el busto del llamado “Conde de Sierra Gorda’’, tras una reseña de las festividades del 2 de mayo por parte del cronista Francisco Castellanos Saucedo.
