México.- El Instituto Nacional Electoral (INE) no pedirá ninguna ampliación presupuestal a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, informó el consejero presidente Lorenzo Córdova durante la aprobación del presupuesto del órgano electoral para 2020, tras ajustar sus partidas a la reducción de mil 71 millones de pesos que aprobó la Cámara de Diputados.
Añadió que pese a los ajustes, el INE iniciará sus operaciones el próximo año, con un déficit de 284 millones de pesos, que se intentarán absorber a partir de medidas de ahorro y el cobro de servicios acordados con otras instituciones que eran gratuitos.
Córdova Vianello expuso que no habrá despidos de personal por la disminución de su presupuesto.
El presupuesto aprobado asciende a 16 mil 660 millones de pesos, de los cuales, 11 mil 421 millones son para la operación del instituto y 5 mil 239 para los partidos políticos.El recorte presupuestal de mil 71 millones al órgano electoral se enfrentará con la postergación de diversos proyectos, como la renovación del equipo de software para monitorear medios de comunicación, la construcción de dos sedes locales, la modernización del mobiliario de los módulos de atención ciudadana, y posponer un mes la instalación de los consejos distritales.
Los partidos de oposición se manifestaron contra el recorte y consideraron que ello afectará la operación del instituto. Insistieron en que el gobierno federal quiere debilitar al INE y nombrar el próximo año, consejeros a modo.
Alejandro Vieldma, representante de Morena, consideró que es de conveniencia la molestia que expresa la oposición por la reducción presupuestal, y se preguntó si en 2018, le incomodo al PRI el recorte que se aplicó al órgano electoral.
A los señalamientos de que Morena va por los lugares del Consejo General del INE que quedarán vacíos al concluir el mandato de cuatro consejeros en abril próximo, el diputado recordó los señalamientos del académico Diego Valadés en el sentido de que el INE es el resultado de una negociación entre las fuerzas políticas que hoy representan a la minoría. Morena representa el 53 por ciento de los electores y no tiene ninguna participación en la integración del órgano que regula las elecciones. De manera que no hay que asustarse porque se plantean cambios que obedezcan a una nueva realidad política.