Los chóferes de microbús Emeterio Valadez, Alejandro Colunga, Edgar Izaguirre y José Luis Escobedo mencionaron que la situación se les ha complicado al tener ya más de mes sin trabajar por la contingencia sanitaria implementada por el Covid-19.
En entrevista realizada después de haber sido recibidos en Palacio de Gobierno Estatal, indicaron que no les ha quedado más remedio que empeñar algunas cosas de valor como autoestéreos, equipos de sonido de las unidades, aparatos electrodomésticos, sin embargo señalaron que en las Casas de empeño siempre buscan pagar lo menos posible.
Asimismo indicaron que acudieron a Gobierno para solicitar más ayuda y mencionaron que la respuesta fue favorable ya que les prometieron otra despensa y una reunión con personal de Desarrollo Económico para tramitar un préstamo.
«Ahorita nos prometieron una despensa y la mayoría de nosotros estamos en una situación desesperante, va haber un préstamo», refirió Valadez.
Agregó que ellos son de varias rutas y acudieron en representación de 130 choferes, además destacó que en un día normal con unas seis vueltas gastan mil 200 pesos en combustible, por lo tanto, con el 20 por ciento de pasaje que hay en este tiempo, es mejor parar las unidades para no tener más pérdidas.
