Si bien es cierto corresponde al Ejecutivo estatal la operatividad de la Dirección de Tránsito, la cuestión administrativa, incluyendo las altas y bajas de los agentes, es responsabilidad del Presidente Municipal, aseguró el titular de la corporación vial Guillermo Hernández Valdez.
«Los exámenes de control y confianza los resultados se manejan en cadena de custodia del Sistema Estatal de Seguridad Pública al Presidente Municipal, y es el Presidente Municipal quien tiene la obligación de solicitar la baja de los funcionarios en este caso de Policía de Tránsito que hayan reprobado el examen de control y confianza».
En ese sentido, Hernández Valdez aclaró que si bien es cierto la operatividad es facultad del Estado, corresponde al Ayuntamiento de Victoria la administración con relación a nóminas, vehículos y demás activos.
«La administración es del Municipio, en su total generalidad es del Municipio, tanto nóminas como la cuestión de vehículos, igual lo que se genera por multas y todo es del Municipio».
Para recalcar, Hernández Valdez agregó; «solamente la operatividad y el cargo de su servidor, son por parte del Estado».
El Director de Tránsito señaló que con relación a los exámenes de Control y Confianza de los agentes de vialidad, es el Presidente Municipal quien recibe los resultados del Sistema Estatal de Seguridad Pública.
“Es una cadena de custodia que viene del Sistema Estatal de Seguridad Pública al Alcalde, él recibe los resultados y el tiene la facultad para de inmediato instruir al Secretario del Ayuntamiento para que se proceda conforme a la Ley de Seguridad la situación laboral de los que hayan salido reprobados en el examen de Control y Confianza”.
Cuestionado expresamente sobre quién tiene la facultad para incorporar o cesar a algún elemento de Tránsito, Hernández Valdez dejó en claro; “así, aunque él (el Presidente Municipal) me notificara a mí yo no tengo personalidad para ordenarle al Oficial Mayor o a Recursos Humanos que dé la baja”.
