Pese a las altas y bajas en su carrera, el conocido cantautor tamaulipeco no abandona sus sueños de triunfar en el mundo de la música
Zeferino Herrera es un cantautor tamaulipeco que ama sus raíces humildes, sus interpretaciones están dedicadas al amor, a la amistad, a su familia y a la tierra que lo vio crecer como uno de los más destacados representantes de la música regional.
En entrevista con el famoso cantautor, dijo que en 10 años de trayectoria ha tenido altas y bajas, debido a que ser cantante es una carrera muy difícil, en especial si se es solista, por la falta de apoyo y promoción a los artistas del Estado.
Originario de Ciudad Victoria, Zeferino cambió los números por la cantada. Estudió en la Universidad Autónoma de Tamaulipas la carrera de Contador Público, pero dejó de lado la idea de trabajar ocho horas en una oficina, al pararse por primera vez en un escenario en un concurso de canto de la UAT.
“Cuando entré a estudiar a la Facultad de Comercio, me di cuenta que los números no eran lo mío, a mí me gustaba hablar, alegrar a la gente con mis canciones, en los años que llevo como cantante, me ha tocado cantar ante sillas vacías y también en lugares llenos, otras veces yo he tenido que animar a las personas a salir de sus casas para llenar los festivales”.
Narró que desde niño mostró inclinación por la música regional mexicana, pues creció escuchando canciones de grupos como los Cadetes de Linares, Luis y Julián y Tigres del Norte y de artistas como Vicente y Alejandro Fernández, José Alfredo Jiménez y Javier Solís.
Comentó que su primera oportunidad la tuvo en un Reality Show que realizó una estación de radio en esta capital, pero la producción de este programa fue una gran decepción para los participantes, ya que no cumplió con los premios que se otorgarían a los ganadores, pero en ese tiempo sus aspiraciones eran poder grabar un disco.
A pesar de mostrar un gran talento para interpretar la música grupera, vernácula y huasteca, el ascenso en su carrera no ha sido fácil por la falta de promoción y de recursos para cantantes como él, que en sus inicios tuvo que conseguirse eventos por cuenta propia en plazas, acontecimientos políticos y festivales, sin recibir pago alguno.
“Comencé cantando en las campañas de algunos políticos, la mayoría de las veces sin paga, pero me interesaba que la gente me conociera y el público me aceptó, pero en estos días hay tanta competencia que tiene uno que andarse moviendo para que nos tomen en cuenta”.
Después de más de un año de presentaciones, Zeferino fue contratado por el Ayuntamiento de Victoria para participar en eventos en varios lugares dentro y fuera de Tamaulipas, fueron años en que su carrera empezaba a tomar forma, pero con la salida de dicha administración, tuvo que renunciar para comenzar una carrera de manera independiente.
Se ha presentado en fiestas, bautizos, bodas, fiestas patronales, festivales de música, en el único lugar donde no ha cantado es en un funeral, detalla.
“Hice casting para la Voz México en Monterrey, pero no avancé al último filtro en la Ciudad de México y la verdad yo estaba muy ilusionado, pero pensé que esto no era el fin. Confieso que algunas veces me sentí muy deprimido, porque esta es una carrera bastante difícil, pero es lo que más amo hacer”.
En su trayectoria ha grabado dos discos, uno con recursos propios donde se encuentran Interpretaciones como “Por amor al arte”, el cual se escuchó ya en toda la región, “Lindo Tamaulipas”, “Arráncame el corazón”, “Un canto de paz” y “Lo que siento por ti”, todas de su autoría.
Contó que estos últimos años recibió apoyo de Libertad García Cabriales, anterior directora del ITCA, quien tomó en cuenta su talento para distintos festivales artísticos, lo que le ha dado un nuevo arranque a su carrera.
Zeferino Herrera, el cantautor número uno de Tamaulipas, se considera un artista enamorado de su público, tuvo su exitosa participación el Festival Internacional Tamaulipas.
CITA TEXTUAL…
“Cuando entré a estudiar a la Facultad de Comercio, me di cuenta que los números no eran lo mío, a mí me gustaba hablar, alegrar a la gente con mis canciones».
