Por mil y una razones siempre he dicho que cada elección se parece a un matrimonio, él o la candidata salen a la calle a conquistar ciudadanos, a convencerlos de que son la mejor opción, el mejor partido y luego de ello, cuando ya logran obtener lo que quisieron, uno y otro y hacen lo que les venga en gana.
Para desgracia de los mexicanos hasta hoy no hay, o son muy pocos, los políticos o políticas que le han cumplido a sus electores, la mayoría apenas esperan que termine la luna de miel para engañar, quedarse con una parte del botín o provocar que este se reparta entre los que quieren, sus amigos, familiares, amantes, novios, novias y hasta compadres o compañeros de primaria en la infancia.
Hay, en esa analogía, matrimonios que sostienen tórridos romances con su pueblo, sexenios completos en los cuales los gobernantes siguen atrayendo a sus electores, convenciéndolos de que se hizo la mejor opción pero, al final, viene el amargo sabor de boca, el enterarnos que en realidad supieron engañar muy bien, que eran falsas sus caricias de seis años, que las aplicaron nomás para huir con el botín más jugoso y, aparte de ello, dejar a la mayoría del pueblo contento, quizá los sexenios de Tomás Yarrington, o de Eugenio Hernández, por lo que se les acusa no por lo que se les ha probado, sean ejemplos claros de lo que les hablo, el pueblo les quiso hasta sus últimos días, hasta que en Estados Unidos nos juraron y perjuraron que son corruptos e incluso nos entregaron a los delincuentes.
Existen otros políticos que apenas aguantan un año o un par de años de amoríos y buena onda con sus electores, quizá nuestro actual presidente Enrique Peña Nieto sea la muestra, ganó con mucha ventaja pero luego de unos meses se deterioró la relación, hoy pueblo y político conquistador, terminaron odiándose, los ciudadanos decepcionados, amargados.
Hay un cuento de amor y pasión, este si de la vida real y sin analogía alguna, que no duró ni la noche de bodas, la historia se resume en una líneas porque así fue de breve, resulta que en la fiesta, recepción para los efectos de la boda, la comida se agotaba rápidamente, la novia se ve en la necesidad de decirle a su marido, con quien había firmado horas antes el acta de matrimonio y celebrado el sacramento en la iglesia católica, “amor, la comida para los invitados que están llegando, reparte esa”, el marido, ya sin el tono meloso de los días de noviazgo respondió, “habíamos quedado que cada quien atendería a sus invitados, está es la de nosotros”, apenas termino la frase y la mujer, de armas tomar y decisiones rápidas y drásticas, le reviró, “pues entonces agarra toda tu comida, todos tus invitados y todos los regalos si quieres y se me van a chingar su madre”.
Sirvan esas historias de amor y desencuentros para detallarle que ayer el colectivo del Frente de Defensa Popular y Justicia Tamaulipas organizó una rueda de prensa en la capital del Estado, sin más, acusaron que no los quieren escuchar en los diálogos a los que convocó el presidente electo Andrés Manuel López Obrador para la reconciliación y la paz del país, dijeron que es increíble como se ha eliminado a Tamaulipas como sede de alguno de esos foros, peor aún, acusaron que se tiene preparado escuchar a los reos en análisis y estudios que se harán en el penal de Reynosa pero no quieren atenderlos a ellos, a las víctimas.
La periodista María Jaramillo Alanís, el activista y dirigente de un colectivo que busca desaparecidos, Guillermo Gutiérrez Riesta, manifestaron que la ruta de reconciliación y pacificación debe pasar por este Estado,que existe la obligación de escuchar a quienes tienen amargas experiencias, señalaron que ese menosprecio de no realizar ninguno de esos foros en Tamaulipas puede provocar que ellos se presenten en Monterrey a manifestarse e incluso a obligar a los organizadores a ser escucharlos.
Al final convocaron para el 30 de agosto a una reunión en esta capital para tratar el tema en su propio análisis y recabar propuestas.
Luego de todo lo que se dijo el Senador Américo Villareal declaró que Andrés Manuel estará personalmente en un encuentro con tamaulipecos para tratar el tema aunque, sin que exista información oficial y en respuesta los activistas dijeron que no se trata de uno de los foros para la pacificación y reconciliación, que la agenda de los mismos es pública y en ellos no aparece Tamaulipas.
El caso es que este tema, la aparente acción de ignorar a las víctimas tamaulipecas y escuchar a sus victimarios como en tono de burla, más la necedad de llamar al gabinete a personajes que por su historia no se lo merecen, están provocando que toda la esperanza generada por Andrés Manuel se diluya muy rápido.
Y sí, AMLO y Morena va a necesitar expertos y gente que le apoye a reconquistar al pueblo porque de lo contrario no dude que le pase lo mismo que al novio que en plena fiesta de bodas se atrevió a permitir la posibilidad de que su esposa quedará mal, hiciera el ridículo, es decir, si no toman medidas de emergencia puede ser que todos los que votaron por AMLO para presidente pronto le digan esa frase de que agarre todas sus cosas y a todos sus invitados al gabinete y se vayan juntos a chiflar su máuser y ni la luna de miel disfrute…
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