Ministro norcoreano de Relaciones Exteriores, aseguró que Donald Trump le declaró la guerra a su país y aseguran que tomarán contramedidas
Agencias
Washington.- Ri Yong Ho, ministro norcoreano de Relaciones Exteriores, aseguró que el presidente estadunidense Donald Trump le declaró la guerra a su país y Pyongyang se reserva el derecho a tomar contramedidas, como abatir bombarderos estratégicos de Estados Unidos, aun si no están en el espacio aéreo del país.
“El mundo entero debería recordar claramente que fue Estados Unidos quien declaró primero la guerra contra nuestro país”, declaró a medios en Nueva York.
Ri afirmó que esa conclusión surge del discurso que pronunció Trump el pasado martes 19 ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En esa intervención, el ocupante de la Casa Blanca afirmó: “Estados Unidos tiene gran fuerza y paciencia, pero si se ve obligado a defenderse a sí mismo y a sus aliados, no tendremos más remedio que destruir totalmente a Corea del Norte”.
Según declaró Ri a los periodistas, esas palabras son “claramente una declaración de guerra” contra el régimen de Pyongyang, y recordó que la carta de Naciones Unidas autoriza a sus países miembros a defenderse.
“Dado que Estados Unidos le declaró la guerra a nuestro país, tendremos todo el derecho a tomar contramedidas, incluyendo el derecho de abatir los bombarderos estratégicos de Estados Unidos, incluso si no estuvieran dentro del espacio aéreo de nuestro país”, advirtió.
Ri aseguró que ahora la cuestión de quién va a durar más se responderá entonces, en alusión a un tuit reciente de Trump en el que proclamó que Corea del Norte no iba a durar mucho tiempo.
El sábado 23, durante su participación en los debates de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, el canciller norcoreano informó que su país está en la “fase final” de completar el desarrollo de su arsenal nuclear.
La declaración se conoce dos días después de que el Pentágono anunciara que aviones militares habían volado cerca de las costas de Corea del Norte con la intención de enviar un “mensaje claro” al régimen de Pyongyang.
