Dr. Jorge A. Lera Mejía.
INTRODUCCIÓN:
Motivado por la atenta invitación que me extendiera mi amigo y colega, Dr. Jorge Alberto Pérez Cruz, líder del Cuerpo Académico Consolidado «CABIES», para actuar como comentarista, junto al Dr. Felipe Haces Valdez, del reciente Libro» «Problemas y propuestas para mejorar el presupuesto participativo en la Ciudad de México» (Anáhuac Sur OnLine, MAPorrúa, Dic. 2023), cuyos coordinadores son los doctores Benjamín Méndez Bahena, Jorge Alberto Pérez Cruz y Cuauhtémoc Ochoa Tinoco, a continuación, me permito compartir, algunas reflexiones respectivas al mencionado tema, que representa gran relevancia académica administrativa en el mundo de las políticas públicas para los Estados y Municipios.
DESARROLLO DEL TEMA PP:
El «Presupuesto Participativo» (PP) es el espacio en el que pueden facilitarse las decisiones de inversión que dotarán a las entidades del Estado con los bienes de capital necesarios para cubrir las brechas existentes y que limitan el desarrollo y entrega de los productos.
Es un enfoque alternativo a la presupuestación tradicional que promueve la confluencia de la esfera política y la ciudadanía en un proceso de toma de decisiones que compromete una parte o porcentaje del presupuesto de un determinado nivel de gobierno.
Además, es una forma de participación ciudadana en la que los ciudadanos participan en el proceso de decidir cómo se gasta el dinero público. A menudo se otorga a la población local un papel en el escrutinio y el seguimiento del proceso tras la asignación de presupuestos.
En Latinoamérica, el PP comenzó en Porto Alegre, Brasil, en 1989. Hoy en día, existen más de 3 mil procesos de presupuesto participativo en todo el mundo, la mayoría a nivel municipal.
Las primeras experiencias no formales en México, surgen en la década de 1980 con el Sistema Nacional de Planeación (SNP) y luego en los noventa con el Programa Nacional de Solidaridad (Pronasol), cuando se decidió incluir a la ciudadanía en la planeación y gestión del desarrollo local (García, 2006; Olvera, 2009).
Uno de los objetivos del PP, es buscar el espacio en el que pueden facilitarse las decisiones de inversión que dotarán a las entidades de los Estados y Municipios con los bienes de capital necesarios para cubrir las brechas existentes y que limitan el desarrollo y entrega de los productos.
Otro objetivo, es promover la eficacia y transparencia del destino de los fondos públicos y acciones de la gestión municipal a través de la participación directa de los ciudadanos en la distribución de los mismos. Generar participación democrática a través del debate, intercambio y consenso de ideas. Así como, promover el protagonismo ciudadano en el desarrollo estratégico y territorial de las ciudades.
Por último, consolidar y fortalecer la relación entre Estado Municipal y sociedad civil mediante herramientas participativas.
Entre las utilidades, el PP pueden ayudar a incrementar los ingresos municipales. Pueden desencadenar una redistribución de la inversión municipal hacia la infraestructura básica para las colonias y barrios más pobres. Pueden fortalecer a las redes sociales y ayudar a mediar las diferencias entre los políticos y los grupos de la sociedad civil.
Desde una perspectiva institucional, hay cuatro etapas claves de un proyecto de desarrollo: a) Etapa de investigación, b) Etapa de diseño, c) Etapa de implementación y d) Etapa de evaluación.
Uno de los principales beneficios del PP, es dar eficacia contra la corrupción y la falta de transparencia. La participación ciudadana en el presupuesto recrea la relación Estado confianzas, estableciendo relaciones de confianzas, pues los ciudadanos entienden, comprenden y deciden en conjunto el uso de los recursos y las inversiones.
MECANISMOS PARA APLICAR EL PP DE LA CDMX:
En la ciudad de México, desde 2001-2003 se empezó a aplicar el PP desde la Delegación de Tlalpan, en la Cuauhtémoc en 2002, Miguel Hidalgo, 2005 e Iztapalapa, 2010.
Se formalizó en 2010, al publicarse las reformas a la Ley de Participación Ciudadana del Distrito Federal (LPCDF) y en 2019, cambia a Ley de Participación Ciudadana de la CdMx (LPCCDMX). Siendo hoy la estrategia de presupuestación en la CdMx, del otrora DF.
Bajo este fundamento jurídico, el presupuesto participativo de la nueva Ley se posiciona después de haberse implementado durante 15 años bajo la abrogada Ley y marca la forma en que deberían coordinarse los actores.
Los mecanismos de participación, referidos de manera enunciativa mas no limitativa, se dividen en a) democracia directa, b) democracia participativa, y c) de gestión, evaluación y control de la función pública.
El presupuesto participativo es un instrumento del mecanismo de democracia participativa (LPCCDMX, 2019: art. 7, frac. VI). El título sexto de la ley integra los instrumentos de la democracia participativa, de entre los cuales se enlista en el Capítulo II. La Asamblea Ciudadana y en el Capítulo III. Las Comisiones de Participación Comunitaria, instrumentos de la democracia que tienen atribuciones en materia de presupuesto participativo.
¿Cómo se elabora el presupuesto en la CdMx?
El presupuesto es la herramienta de política pública más importante de cualquier gobierno ya que en él se reflejan las prioridades de programas y proyectos que cada país o comunidad llevará a cabo, considerando el contexto económico internacional, nacional y de la Ciudad.
El presupuesto no es un documento fijo, su proceso de elaboración se llama ciclo presupuestario y tiene las siguientes etapas:
1) Formulación: cuando el poder Ejecutivo (la Jefatura de Gobierno) elabora su propuesta de presupuesto con base en su planeación;
2) Aprobación: cuando el poder Legislativo (Congreso) discute, modifica y aprueba la propuesta de presupuesto del Ejecutivo;
3) Ejecución: cuando el gobierno implementa las políticas financiadas con el presupuesto y realiza adecuaciones a lo aprobado por el Legislativo;
4) Auditoría y evaluación legislativa: cuando la institución superior de auditoría y el Legislativo revisan y evalúan los gastos realizados bajo el presupuesto.
COINCIDENCIAS ENTRE PP Y PRESUPUESTOS EN BASE A RESULTADOS:
El Presupuesto basado en Resultados (PbR), es el proceso que integra, de forma sistemática en las decisiones correspondientes, consideraciones sobre los resultados y el impacto de la ejecución de los programas presupuestarios y de la aplicación de los recursos asignados a estos, con el objeto de entregar mejores bienes y servicios.
El PbR permite vincular la asignación de recursos presupuestales bienes y servicios (productos) y resultados a favor de la población, con la característica de permitir que estos puedan ser medibles.
Además, el PbR permite mejorar la calidad del gasto público y promover una adecuada rendición de cuentas.
En el caso de combinar el Presupuesto Participativo (PP) con el Presupuesto en Base Resultados (PbR), se define como sigue:
El «Presupuesto Participativo basado en Resultados» (PPbR) se enmarca dentro del nuevo enfoque de la «Nueva Gerencia y Gestión Pública», en el cual los recursos públicos se asignan, ejecutan y evalúan en función a cambios específicos que se deben alcanzar para mejorar el bienestar de la población. Lograr estos cambios supone producir resultados que mejoren notoriamente las condiciones de vida de las personas.
El Presupuesto Participativo basado en Resultados (PPbR) comprende la incorporación al proceso de Presupuesto Participativo de las corrientes renovadoras del presupuesto y la gestión por resultados en los que el/la ciudadano/a y los resultados que estos requieren y valoran se constituyen en el eje del accionar público.
Para tal fin, se estructuran los presupuestos en función a los productos, es decir bienes y servicios que la población recibe de parte de las instituciones públicas, para lograr los resultados.
El presupuesto anual debe garantizar las dotaciones de recursos necesarios para poder desarrollar los productos, que incluyen las previsiones presupuestarias para los recursos humanos, insumos materiales y bienes de capital
que sean necesarios.
El Presupuesto Participativo es el espacio en el que pueden facilitarse las decisiones de inversión que dotarán a las entidades del Estado con los bienes de capital necesarios
para cubrir las brechas existentes y que limitan el desarrollo y entrega de los productos.
PRESUPUESTO PARTICIPATIVO EN TAMAULIPAS:
El Presupuesto Participativo es un mecanismo que en Tamaulipas no se tiene registro, por lo tanto, resultaría ser un mecanismo innovador en caso de legislarse, ya que es reconocido en otras ciudades, como la CdMx, como un instrumento que incentiva la participación ciudadana y la gobernanza.
Fue hasta el 9 de junio de 2023, cuando la Legislatura 65 del Congreso de Tamaulipas, recibió finalmente la propuesta de reformas a la «Ley de Participación Ciudadana del Estado», con el objeto de incorporar el Presupuesto Participativo (PP), mecanismo que promueve la participación de la ciudadanía en los asuntos públicos, incluyendo la toma de decisiones sobre la asignación de recursos municipales.
En su participación, la Diputada Alejandra Cárdenas Castillejos, expresó que, “Un ejemplo de resultado del presupuesto participativo, en la Ciudad de México, es la construcción y mejora de parques y espacios públicos en diferentes colonias y alcaldías”. Refirió que «será por medio de asambleas ciudadanas o juntas de vecinos que existan en el sector, colonia o fraccionamiento respectivo, como se elijan y definan los proyectos, realización de obras o ejecución de programas a cargo del presupuesto de egresos municipal en esta modalidad».
Lo anterior, bajo la administración, ejecución y responsabilidad de las autoridades municipales correspondientes.
“Transitemos a una forma de gobernar de la mano de las y los ciudadanos, y avancemos juntos para lograr mejores condiciones de vida para la gente de Tamaulipas”, resaltó la legisladora local.
Los antecedentes registrados en el Congreso Estatal para iniciar el proceso de adaptarse al mecanismo de PP, data desde junio del 2020.
En junio del 2020, a través de una Iniciativa, se pretendió incorporar en el marco jurídico del Estado, una base institucional sólida que modifique la lógica de la toma de decisiones y que vaya más allá de la participación ciudadana en las elecciones.
En el desahogo de la agenda legislativa en el Congreso del Estado, se recibió la propuesta de reformas a la Ley de Participación Ciudadana de Tamaulipas la cual busca adicionar un Capítulo denominado “Del Presupuesto Participativo”.
La Diputada Laura Patricia Pimentel Ramírez, promovente de las modificaciones, resaltó que se entenderá al presupuesto participativo como un instrumento de gestión y participación ciudadana directa, a través del cual los ciudadanos podrán decidir sobre el destino de un porcentaje de los recursos públicos.
“El Gobierno del Estado y los Municipios estarán obligados a realizar anualmente la consulta de presupuesto participativo, en los términos de la presente ley, que corresponderá al 15 por ciento del presupuesto destinado a inversión pública productiva en el Presupuesto de Egresos de Estado o del Municipio”, precisó.
Refirió que, dentro de esta reforma, se propone que, para la celebración de la consulta de presupuesto participativo, se convocará a Foros Ciudadanos en cada región del Estado, para que en ellos la sociedad pueda proponer las obras y proyectos que se someterán a consideración en la consulta.
“La convocatoria deberá ser difundida de manera amplia en los medios de comunicación estatales, regionales y municipales”, enfatizó Pimentel Ramírez.
La Mesa Directiva del Poder Legislativo, turnó a análisis esta Iniciativa de reforma, para ser dictaminada como corresponda.
RETO PARA LA ACTUAL 66 LEGISLATURA Y DEL GOBIERNO DE AVA:
Ante las experiencias obtenidas desde 2011 en la Ley de Participación Ciudadana del DF, y desde 2019 con la modificada Ley de Participación Ciudadana de la CdMx (LPCCDMX), el Gobierno de Tamaulipas a cargo del Dr. Américo Villarreal Anaya, y la Secretaría de Finanzas, Adriana Lozano Rodríguez, están gestionando la adaptación por medio del Congreso de la nueva Ley de Participación Ciudadana para ser utilizada en el ejercicio de presupuestación en base al Presupuesto Participativo, y ajustar el mismo como PP en base de Resultados (PPbR).
Hasta ahora no se ha legislado en definitiva este reto, siendo qué desde el 30 de agosto, la Secretaría de Finanzas arrancó los ejercicios de presupuestación sin usar el modelo de PP.
El 30 de agosto iniciaron los trabajos pertinentes para realizar la planificación de los programas presupuestarios para el Proyecto de Egresos del 2025.
La planificación de los programas presupuestarios para el Proyecto de Egresos 2025 es dirigida por la Dirección de Planeación Estratégica de la Secretaría de Finanzas, y se están enfocando en la revisión, modificación y reestructuración de los recursos públicos con la finalidad de atender demandas y necesidades sociales, sin el modelo PP.
Actualmente en Tamaulipas, el presupuesto se diseña bajo los principios del humanismo que guía el gobernador Américo Villarreal Anaya.