Conforme termina el sexenio, aumenta la expedición de fíats de Notario Público. Es una mecánica de cada fin de sexenio. En esta ocasión no podría ser diferente.
Ya no son los funcionarios de primer nivel los que se “premian” con la fe pública como forma de jubilación o “bono de retiro”. Ahora la Ley se los prohíbe. Esta vez son los recomendados de esos funcionarios.
A como vamos, si bien existe un promedio de 250 notarios en el territorio estatal, para octubre la cifra podría andar en media centena más. Es que los fíats son hereditarios y hasta se pueden rentar.
Cuando estamos a dos semanas del fin del sexenio, han aparecido cuando menos 15 nuevos fedatarios. Seguro que para los siguientes días habrá más. Así lo hemos visto en los gobiernos anteriores.
En el presente, el primero fue otorgado a Raúl César González García, de Matamoros. Hombre cercano al poder estatal, recibió el beneficio en marzo del 2015 y se interpretó como una especie de “indemnización”.
Sale sobrando hacer una presentación suya de César. Fue secretario del Trabajo y luego candidato perdedor a una diputación por Matamoros, en el 2013.
Para agosto del mismo año, el segundo agraciado fue Armando Martínez Saleh, de Altamira, hijo de la ex secretaria de Educación en los tiempos del geñismo, Ganeth Saleh Gattas.
A estas alturas son muchos los agraciados. La semana anterior se publicó una buena cifra: Karina del Carmen Gómez Quintero, Manuel Lara Enríquez, Antonio Bonilla Rodríguez, Brenda Mayela Marroquín Reyes, Juan Angel Rivera Echazarreta, Celso Pérez Amaro, Paola Gómez Ugalde, Hiram González Barrera, Juan Carlos Rodríguez Caballero, Daniel Molina Leija.
Se heredan: Leonardo Bonilla Barrios le hereda a su hijo Antonio Bonilla Rodríguez. Antonio Marroquín Vargas a Brenda Mayela Marroquín Reyes.
Cambian de distrito o sede aprovechando el fin de sexenio: Marco Antonio Mansur Sánchez se traslada de Xicoténcatl a Victoria, en tanto Roberto Rodríguez Romero, de Matamoros a Reynosa.
De acuerdo con los estándares nacionales, en Tamaulipas sobra la mitad de los fedatarios y eso ocasiona que vean reducido su mercado de trabajo.
Si el promedio nacional es de 3.3 por cada cien mil habitantes, en la tierra cueruda promediamos 6.3.
Tan solo en ciudad Victoria son 40 las notarías, como si la capital tuviera cuatro millones de habitantes (tienen que pelear a los clientes).
Claro que no es algo exclusivo de la región. Según la estadística, la competencia más desleal la vive Campeche, donde son 10.1 notarios por cada cien mil, seguido por Coahuila con 9.0
Los colegios de notarios se quejan cada vez que un gobierno expide como volantes sin ver que la persona beneficiada cumpla los requisitos. Aunque nadie lo dice, jamás se ha realizado un examen de conocimientos. Tampoco nadie ha sido despojado de la fe por cometer irregularidades
Hay otras entidades en que los fedatarios sí tiene trabajo. En Tlaxcala son 0.9 por cada cien mil.
Sobre este renglón, en el gobierno del estado no hay un parámetro. Aquí tenemos un fedatario por cada 20 mil habitantes, en tanto que en Nuevo León, con casi cinco millones de habitantes, apenas son 146.
Cada fin de sexenio salen más sin que cumplan el mínimo de requisitos. Vienen siendo indemnizaciones o bono de retiro para los amigos. Ahora es para los amigos de los amigos.
El único que no abusó de esa facultad que le confiere la Ley fue Américo Villarreal Guerra. En todo el sexenio entregó notarías a seis personas.
Emilio Martínez Manautou pasó lista con 71 ( benefició a abogados que ni siquiera había visto en su vida).
Antes de entregar el mandato en el 2010, Eugenio Hernández Flores firmó 25 nuevos fíats.
La mayor parte de los funcionarios de los gobiernos priístas –hombres y mujeres- son notarios con licencia. Cada año están renovando su documentación para no perder la condición.
Cabe señalar que la inmensa mayoría, mientras desempeñan cargos públicos, rentan sus documentos al mejor postor o designan como adjuntos a familiares que les “pasan” cierto porcentaje de las ganancias.
Ahora bien, económicamente ¿cuánto cuesta ser notario? La Ley menciona que hay que depositar una garantía por 35 mil pesos que bien puede ser en fianza, un inmueble o en efectivo. Demasiado barato.
En otros asuntos, comenzaron a repartirse las invitaciones para el último informe del Gobernador Egidio Torre Cantú, que será el miércoles 21 en esta capital.
También las invitaciones del equipo de Cabeza de Vaca para la sesión del Congreso en que rendirá su protesta como Gobernador, el uno de octubre en el Palacio Legislativo. Esta vez no habrá cambio de recinto.
Después de cumplir con el protocolo, Francisco Javier sostendrá un encuentro con la clase política y sociedad civil en el Polyforum, en que dirigirá un mensaje. Ahí habrá de expresar las líneas generales de lo que será su gobierno.
Aunque cada equipo organiza los respectivos eventos, se entiende que los dos Gobernadores asistirán a sendos eventos. Es una cortesía política que se ha hecho costumbre y pronto será Ley.
La entrega recepción –firma de documentos por parte de representantes de la Contraloría- será el último de septiembre. Por la tarde se espera que el nuevo Gobernador de a conocer la lista de sus colaboradores.
En su tiempo se informará quienes serán los representantes del Presidente Peña Nieto para ambos eventos.
PD.- Que la Contralora no halla a ex funcionarios que se fueron con “hebra” (para cobrarles) pese a que los ha buscado en el padrón del INE, usuarios de Telmex, Comapas, Sistema Estatal de Seguridad Pública y Módulo de Investigación Policial ¿dónde se esconden? Habría que preguntarle a elementos como Tomás Yarrington.