Respeto y profesionalismo, son la fórmula para seguir en el gusto de sus seguidores y permanecer vigentes en una carrera que él inició en 1963
Agencias
Monterrey.- Una carrera artística de 54 años vigente en el gusto de los públicos de México y Estados Unidos llena de orgullo a Ramón Ayala, el llamado «Rey del Acordeón”, quien siguió el camino de otras agrupaciones pioneras de antaño para mantener en alto “la original música norteña”.
“Esa está desde antes de que fuera músico, a la edad de cinco años. Anteriormente eran Los Alegres de Terán, Los Donneños, Los Hermanos Banda, Tony de la Rosa, en grupos texanos, Rubén Vela. Aquí en México eran Los Gorriones del Topo Chico, Los Compadres de Apodaca, Los Norteños de Nuevo Laredo”, rememoró el cantante en entrevista.
“Todos esos grupos hacían lo que era la música norteña, entro yo, a la edad de cinco años a tocar el acordeón y agarro mi propio estilo y comenzamos en 1963 a grabar nuestro primer disco con Cornelio Reyna, en paz descanse mi compañero, y pues era un trancazo, ahí nos quedamos y nos vinimos hasta acá”, continuó.
Externó que “-el género norteño- está vivo; nosotros hemos visto pasar a muchos grupos, desde cuando estaba La Sonora Santanera, estaba Mike Laure, estaba también Rigo Tovar, a muchos grupos –de diversos géneros- vimos pasar y nosotros todavía andamos aquí dando lata”, expresó.
Ramón Ayala aseveró que la carrera artística es de altas y bajas, pero hay que “seguir adelante, si te va una vez mal, no te agüites, échale y síguele y síguele, hasta que vienen los éxitos, se vuelve otra vez la fama del grupo”, remarcó el líder de Los Bravos del Norte, emblemática agrupación de la música regional.
A sus 71 años, el «Rey del Acordeón” suma 130 discos grabados, con ventas superiores a 35 millones de volúmenes que lo han hecho ganar en cuatro ocasiones premios como el Grammy o discos de oro, entre otros.
En los tiempos actuales con el auge de las nuevas tecnologías como el Internet y las redes sociales, la música de Los Bravos del Norte se escucha en muchas latitudes de América, no sólo en México y Estados Unidos, comentó.
“Con esto del Internet y las redes sociales ahorita me están hablando de Chile, de Colombia, de El Salvador, de todas partes, que vayamos para allá, nomás que el problema es que nosotros no tenemos promotores por esos rumbos», externó el artista nacido en Monterrey, pero avecindado en Hidalgo, Texas.
Sobre la fórmula que aplica para seguir en el gusto de los seguidores por más de medio siglo, expresó que eso principalmente se logra con respeto y profesionalismo, aunado a seguir grabando discos.
A decir del afamado cantante y acordeonista, tener el tiempo y la humildad para complacer a los seguidores, en este caso de la música norteña, son primordiales para permanecer vigentes en una carrera que él inició en 1963, con el extinto Cornelio Reyna, con quien formó Los Relámpagos del Norte.
“Primeramente hay que complacer al público en todo lo que se pueda, muchas veces la gente quiere tomarse una foto contigo, pues tómatela con ellos, quieren que les firmes algún autógrafo, donde quiera, en su camisa, en un poster o un retrato, hay que hacerlo, porque nos debemos a ellos”.
La otra, añadió, «es tener la responsabilidad de si estás contratado en una parte tienes que ir, sea como sea, tienes que ir, solamente que no te quieran pagar, entonces no vas, pero si te mandan tus anticipos, pues tienes que ir”.
También no dejar de grabar es importante, y detalló que en sus 54 años de carrera artística «tenemos ya 130 discos grabados, desde que comenzamos como Los Relámpagos del Norte y después con Los Bravos del Norte de Ramón Ayala”.
Algo fundamental “es tener los pies bien puestos en la tierra, no vaya a pasar que te creas mucho y se termina tu carrera”, enfatizó el ídolo de la música regional en México, quien a lo largo de su trayectoria ha tenido un sinnúmero de éxitos en el catálogo de la música norteña en México.
“Por el amor a mi madre”, “Callejón sin salida”, “Tengo miedo”, con Los Relámpagos del Norte, “Que me lleve el diablo”, “Bonita finca de adobe”, “Tragos amargos”, con Los Bravos del Norte, son algunos de esos temas emblemáticos.
Ramón Ayala y los Bravos del Norte se presentarán el 2 de septiembre ante el público regiomontano en el Auditorio Citibanamex.
Monterrey.- Una carrera artística de 54 años vigente en el gusto de los públicos de México y Estados Unidos llena de orgullo a Ramón Ayala, el llamado «Rey del Acordeón”, quien siguió el camino de otras agrupaciones pioneras de antaño para mantener en alto “la original música norteña”.
“Esa está desde antes de que fuera músico, a la edad de cinco años. Anteriormente eran Los Alegres de Terán, Los Donneños, Los Hermanos Banda, Tony de la Rosa, en grupos texanos, Rubén Vela. Aquí en México eran Los Gorriones del Topo Chico, Los Compadres de Apodaca, Los Norteños de Nuevo Laredo”, rememoró el cantante en entrevista.
“Todos esos grupos hacían lo que era la música norteña, entro yo, a la edad de cinco años a tocar el acordeón y agarro mi propio estilo y comenzamos en 1963 a grabar nuestro primer disco con Cornelio Reyna, en paz descanse mi compañero, y pues era un trancazo, ahí nos quedamos y nos vinimos hasta acá”, continuó.
Externó que “-el género norteño- está vivo; nosotros hemos visto pasar a muchos grupos, desde cuando estaba La Sonora Santanera, estaba Mike Laure, estaba también Rigo Tovar, a muchos grupos –de diversos géneros- vimos pasar y nosotros todavía andamos aquí dando lata”, expresó.
Ramón Ayala aseveró que la carrera artística es de altas y bajas, pero hay que “seguir adelante, si te va una vez mal, no te agüites, échale y síguele y síguele, hasta que vienen los éxitos, se vuelve otra vez la fama del grupo”, remarcó el líder de Los Bravos del Norte, emblemática agrupación de la música regional.
A sus 71 años, el «Rey del Acordeón” suma 130 discos grabados, con ventas superiores a 35 millones de volúmenes que lo han hecho ganar en cuatro ocasiones premios como el Grammy o discos de oro, entre otros.
En los tiempos actuales con el auge de las nuevas tecnologías como el Internet y las redes sociales, la música de Los Bravos del Norte se escucha en muchas latitudes de América, no sólo en México y Estados Unidos, comentó.
“Con esto del Internet y las redes sociales ahorita me están hablando de Chile, de Colombia, de El Salvador, de todas partes, que vayamos para allá, nomás que el problema es que nosotros no tenemos promotores por esos rumbos», externó el artista nacido en Monterrey, pero avecindado en Hidalgo, Texas.
Sobre la fórmula que aplica para seguir en el gusto de los seguidores por más de medio siglo, expresó que eso principalmente se logra con respeto y profesionalismo, aunado a seguir grabando discos.
A decir del afamado cantante y acordeonista, tener el tiempo y la humildad para complacer a los seguidores, en este caso de la música norteña, son primordiales para permanecer vigentes en una carrera que él inició en 1963, con el extinto Cornelio Reyna, con quien formó Los Relámpagos del Norte.
“Primeramente hay que complacer al público en todo lo que se pueda, muchas veces la gente quiere tomarse una foto contigo, pues tómatela con ellos, quieren que les firmes algún autógrafo, donde quiera, en su camisa, en un poster o un retrato, hay que hacerlo, porque nos debemos a ellos”.
La otra, añadió, «es tener la responsabilidad de si estás contratado en una parte tienes que ir, sea como sea, tienes que ir, solamente que no te quieran pagar, entonces no vas, pero si te mandan tus anticipos, pues tienes que ir”.
También no dejar de grabar es importante, y detalló que en sus 54 años de carrera artística «tenemos ya 130 discos grabados, desde que comenzamos como Los Relámpagos del Norte y después con Los Bravos del Norte de Ramón Ayala”.
Algo fundamental “es tener los pies bien puestos en la tierra, no vaya a pasar que te creas mucho y se termina tu carrera”, enfatizó el ídolo de la música regional en México, quien a lo largo de su trayectoria ha tenido un sinnúmero de éxitos en el catálogo de la música norteña en México.
“Por el amor a mi madre”, “Callejón sin salida”, “Tengo miedo”, con Los Relámpagos del Norte, “Que me lleve el diablo”, “Bonita finca de adobe”, “Tragos amargos”, con Los Bravos del Norte, son algunos de esos temas emblemáticos.
Ramón Ayala y los Bravos del Norte se presentarán el 2 de septiembre ante el público regiomontano en el Auditorio Citibanamex.
SABÍAS QUÉ…
A sus 71 años, el «Rey del Acordeón” suma 130 discos grabados, con ventas superiores a 35 millones de volúmenes que lo han hecho ganar en cuatro ocasiones premios como el Grammy o discos de oro, entre otros.
